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sábado, 10 de noviembre de 2012

No pierdes nada, a lo mejor ganas unas lagrimas.

Ahora, después de tantas noche sin poder dormir, pensando si pensabas en  mi, después de cada lágrima y cada sonrisa por cada mensaje tuyo, después de tantos meses de "si, no, no, si" de vistas a escondidas y de querer verte me he dado cuenta que no te necesito, que no te echaba de menos, bueno a lo mejor un poco si, pero que lo que pasaba era que te habías convertido en mi rutina, en mi día a día y necesitaba romper con esa jodida rutina y al final fue lo mejor, unos jodidos kilómetros y un poco de tiempo me hicieron entrar en razón y recapacitar.
Y así de repente, como quien no quiere la cosa llega alguien a tu vida, alguien que puede que conocieras o que no, alguien de quien habías oído hablar tanto bien como mal, sí, ya sabéis una de esas personas que las has oído, que sabes lo que dicen de ellos pero no sabes por lo que han pasado, de las que conoces su  nombre pero no su historia y de repente te sorprendes, te vuelves a enamorar y decides arriesgarlo todo aunque sabes que puede ser que te pegues la ostia emocional del siglo pero bueno, siempre piensas "por intentarlo no pierdo nada, a lo mejor gano unas lagrimas pero no pierdo nada" y decides intentarlo, así que lo siento mucho aunque sigas estando ahí esta vez no vas a conseguir joderme los planes con tu sonrisa ni con tu mirada ni ninguna de esas cosas, esta vez es distinto, esta vez será la buena.

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